Hercules destroza la tierra formando una bola enorme. La lanza hacia los enemigos que los golpea y los lanza hacia atrás. La bola sigue rodando haciendo el mismo daño a su paso. Si golpea varias veces genera sólo el 50% del golpe anterior.
Habilidad: Terrestre Targe Afecta: Enemigo Daño: Físico Radio: 15 Daño: 300/425/550/675/800 (+100% de tu poder físico)La Historia de Hercules....play para lectura automatica.
Hércules el Bravo, el hijo semidiós de Júpiter, que nace con la fuerza imposible y la fuerza de voluntad, para quien no hay tarea insuperable, no hay gesta inalcanzable. Sin embargo, igual que todos los hijos naturales de Júpiter, Hércules una vez provocó la ira de Juno, y a pesar de que ahora se conoce como un héroe, sus mayores logros nunca podrían haber sido posibles sin la participación inicial tan trágica de Juno.
Éste volvió loco a Hércules, y él mató a sus propios hijos.
Una vez recuperado, desconsolado, Hércules buscó penitencia por sus crímenes. Un oráculo de Júpiter aconsejó que debía prometer su servicio al rey Euristeo, y así Hércules lo hizo a regañadientes. Celoso del semidiós, el rey le estableció doce tareas imposibles, esperando que fallara en la primera, matar al León de Nemea y volver con su piel.
El León de Nemea capturaba mujeres y devoraba soldados. Su piel era tan espesa que ningún arma podía perforarla, y sus garras tan afiladas, que no había armadura que pudiera protegerse contra ellas. Hércules siguió al león a sus cuevas de las montañas, lo sacó, disparando flechas que se estrellaron contra la capa impenetrable de la bestia. Ágil, lo esquivó tan rápido como el león saltó a él. Al final, Hércules dirigió un potente disparo directamente a las fauces del león, que rugía, un lugar de la piel de gran alcance que no protegía su acorazada piel, y lo mató. Luego, usando las propias garras de la bestia, peló la piel, llevando el manto con orgullo como su nueva armadura.
Euristeo quedó horrorizado con el regreso del héroe. Inmediatamente la leyenda de Hércules empezó a crecer. Once tareas más le ordenó el confuso rey, pero una y otra vez, año tras año, Hércules realizó lo que no se podía hacer, ganando la fama, la gloria y la paz que buscaba tan desesperadamente.